New Balance 880 V8

Las New Balance 880 v8 tienen unas premisas básicas de las que no se han separado (prácticamente) nunca. Son unas zapatillas de concepción clásica, muy amortiguadas, muy estables, contundentes, confortables, duraderas, con drop alto, … Son unas “zapatillas como está mandado” que diría un clásico pero lo bueno es que han sabido mantener esa filosofía modernizándose, mejorando todas sus zonas, consiguiendo uppers más agradables y adaptables, … y todo eso hace que el que se acerca a ellas y disfrutan corriendo con ellas repite versión tras versión.

Tendrán menos fama que algunas de sus hermanas pero son unas zapatillas infalibles, sabes que nunca te van a fallar ni a dejar tirado. La mediasuela mantiene el Trufuse como tecnología básica pero ha mejorado significativamente la dinámica y, aunque siguen siendo eminentemente rodadoras y para ir a ritmos medios o tranquilos, ahora es más homogénea la transición de la pisada. Bastante altas y con un drop de 10 milímetros, las disfrutan más quienes tienden a talonar. La suela es algo más asfaltera, dura más y es un seguro de vida porque agarra en todas las superficies y situaciones.

Además, con ese grosor, como os podéis imaginar, le vais a poder sacar muchos kilómetros. El upper ha dado un pasito adelante y se ha simplificado un poco más para conseguir mejorar el ajuste, transpirabilidad, tacto, etc. sin por ello renunciar a la contundencia en el ajuste que caracteriza a esta serie de zapatillas. La zona trasera es impresionante a nivel de la sujeción lo que, sumado al buen agarre del empeine y a su horma, las hace ideales para ponerle unas plantillas personalizadas. Son ideales como zapatillas de base para quienes gusten de hacer muchos kilómetros y perfectas para hacer el kilometraje de rodajes que suele caer cuando alguien prepara una maratón o media maratón.